Cuando comenzamos a transitar este proceso pueden aparecer muchas palabras, conceptos, estudios y técnicas que no las hayamos escuchado nunca. Esto puede provocar una sensación de incertidumbre, ansiedad o falta de información absoluta. A medida que pasan las primeras consultas médicas y los estudios iniciales para llegar a un posible diagnóstico de por qué no se está logrando embarazo de manera espontánea, es probable que ya cuentes con mayor información, hayas buscado algunos conceptos en internet, hayas consultado con tu médico/a tratante algunas dudas, te hayas unido a foros o grupos que estén transitando el mismo camino, etc. Buscar y adquirir información durante el proceso de búsqueda de embarazo por tratamiento de fertilidad y recibir un correcto asesoramiento, puede hacer que el camino resulte más liviano y hasta incluso (en muchos casos) reducir el tiempo para lograr el objetivo.
La idea de esta nota es que te lleves un resumen fácil de leer y entender de las principales cosas y conceptos que necesitas saber para atravesar un tratamiento de fertilidad.
¡Empecemos!
Relaciones programadas: es una técnica de reproducción asistida de baja complejidad. El ciclo menstrual de la mujer es controlado mediante un especialista para identificar el día de ovulación y programar las relaciones sexuales durante ese periodo fértil.
Inseminación Artificial (IA): es una técnica de reproducción asistida de baja complejidad. Los espermatozoides, previamente seleccionados y capacitados, son introducidos por el aparato reproductor femenino (cerca del inicio de las trompas de Falopio) a través de una cánula de transferencia. La fecundación ocurre dentro del cuerpo de la mujer. Los espermatozoides pueden ser de la pareja o de un donante de esperma.
Fecundación In Vitro (FIV): es una técnica de reproducción asistida de alta complejidad. Los espermatozoides, previamente seleccionados y capacitados, son puestos en una placa junto a los óvulos maduros obtenidos en la punción, esperando que fecunden por sí solos. La fecundación ocurre en el laboratorio de FIV. Los espermatozoides pueden ser de la pareja o de un donante de esperma.
ICSI: es una técnica de reproducción asistida de alta complejidad. Un espermatozoide, previamente seleccionado y capacitado, se microinyecta en el interior de un óvulo maduro. Este proceso es realizado por un embriólogo en el laboratorio de FIV. Los espermatozoides pueden ser de la pareja o de un donante de esperma.
Espermograma: análisis de una muestra de semen. Es una técnica de selección espermática cuyo objetivo es separar los espermatozoides del plasma seminal, y así seleccionar y concentrar los espermatozoides móviles de mejor calidad. Estos espermatozoides seleccionados y capacitados son los que se utilizarán luego en la IA, FIV o ICSI.
Análisis hormonales: en las mujeres se pide un análisis hormonal completo que incluye principalmente las hormonas FSH (hormona folículoestimulante), LH (hormona luteinizante), AMH (hormona antimulleriana), TSH (hormona de la tiroides), Prolactina, Estradiol y Progesterona. En los hombres, los análisis hormonales generalmente se piden cuando el espermograma sale alterado y las principales hormonas que se evalúan son la FSH, LH, Prolactina y Testosterona.
Reserva ovárica: es la cantidad de óvulos que presenta una mujer en un momento determinado. Se puede evaluar con una ecografía transvaginal donde se haga un recuento de folículos antrales y la medición de la hormona antimulleriana.
Histerosalpingografía: es un estudio que sirve para evaluar la permeabilidad de las trompas de Falopio. Se introduce un líquido de contraste por el cuello uterino, con la ayuda de una cánula, para observar la arquitectura del útero y las trompas de Falopio y corroborar que no haya obstrucciones.
Histeroscopía: es un estudio que sirve para descartar la presencia de pólipos, miomas, adherencias, etc. en cuello uterino y útero que puedan estar perjudicando la implantación embrionaria. Se hace bajo sedación introduciendo una óptica por el canal vaginal.
Punción ovárica: es la extracción o aspiración de los folículos ováricos con sus respectivos óvulos dentro después de una estimulación hormonal. Es un procedimiento que se hace bajo sedación y dura entre 10 y 15 minutos. Se realiza en los tratamientos de reproducción asistida de alta complejidad.
Transferencia embrionaria: es el proceso mediante el cual el embrión formado en el laboratorio se deposita en el útero materno mediante una cánula de transferencia. No se necesita anestesia ni sedación en la mayoría de los casos.
Implantación embrionaria: es el proceso que realiza el embrión para introducirse en el útero materno y puede demorar varios días.
Betaespera: es el tiempo que pasa entre la llegada del embrión al útero (de manera espontánea o a través de una transferencia embrionaria) y el momento en el que se puede comprobar con un Test de embarazo (sangre u orina) si se logró una implantación exitosa.
Test de embarazo: son Test que se compran en la farmacia y sirven para detectar la hormona beta hCG en la orina de una mujer embarazada.
Análisis de beta hcg en sangre: es el análisis de sangre que comprueba los niveles de beta hcg en una mujer embarazada.
Test genéticos: existen estudios genéticos tanto para la etapa preconcepcional (antes de comenzar la búsqueda de embarazo), como para la etapa preimplantacional (antes de transferir el embrión al útero materno), como así también para la etapa prenatal (durante el embarazo).
Donación de gametos: una persona anónima y de manera voluntaria puede donar sus óvulos o esperma a una persona o pareja para que sean utilizados en los tratamientos de fertilidad.
Abortos espontáneos: son pérdidas gestacionales que pueden ocurrir en el primer, segundo o tercer trimestre de embarazo. Si ocurre 2 veces o más, se puede considerar aborto recurrente y es necesario realizar diferentes estudios para encontrar la/s causa/s que podrían estar provocándolo.
Test de ADN fetal en sangre materna: es un análisis de sangre que se puede hacer la mujer embarazada a partir de las 9 o 10 semanas de embarazo para detectar la presencia o ausencia de ciertas anomalías cromosómicas en el bebé. Es un estudio no invasivo, de screening/ detección y se usa de manera complementaria al resto de los controles del embarazo.
TN o TN plus: la TN es una ecografía detallada que se hace al finalizar el primer trimestre de embarazo y sirve para analizar ciertos marcadores ecográficos que podrían estar asociados con las principales anomalías cromosómicas. La TN plus le suma un análisis de sangre donde se miden la hormona beta HCG y la proteína PAPP A que están relacionadas con la placenta. En conjunto, el análisis arroja las probabilidades de que el bebé presente alguna de las 3 trisomías más importantes y el riesgo de que haya algún problema placentario como preeclampsia en el embarazo o alguna restricción de crecimiento intrauterino.
Amniocentesis o biopsia de vellosidades coriales: son estudios diagnósticos e invasivos que confirman si el bebé presenta o no alguna anomalía cromosómica / genética.
Estos son algunos de los conceptos o palabras que te pueden nombrar en alguna parte del proceso de fertilidad. Entender cada uno de ellos, saber por qué te están mandando a realizar un estudio determinado, comprender los resultados de los mismos, estar bien asesorados, acompañados y guiados en cada una de las etapas, puede hacer una gran diferencia en el resultado final.